Mira a que pendex |
He conocido a jovenes que vencieron el plazo perentorio dictaminado por la vida volviendose parte de la hisotria pero yo viví en la era del pingüino; nada tiene que ver con calendarios prehispanicos o con horoscopos asiaticos.
La era del pingüino caracterizada los florecimientos, porque para que florezca se necesita la semilla y en un estado hace falta una planificacion de siembra y un sembrador. Gracias compañero, yo que soy hijo de la democracia pero también hijo del consumo, del neoliberalismo de los '90; comprendo hoy lo que implica la producción y más aún aprendí a sembrar.
Todavia lo veo jugueteando con el ardiente baston de mando cual si fuese un sonajero, honroso de lucir los atributos para inciar la primavera argentina. Desmitificaste tanto a la política que la volviste patrimonio popular y eso te adjudico un lote en el oscuro corazón de los cipayos.
Tan simple como es el amor a la patria y directo como fuiste a buscar el cariño de los argentinos, algo que no lograrán corromper jamas las retorcidas mentes editoriales de los traidores que desenmascaraste.
Feliz día de la primavera.
cumpa si me permitís lo llevo al blog del MPB
ResponderBorrarabrazo