Oh! Maestro Mephisto

Roberto Peña, hoy productor independiente y un legislador

Cerrado el pase más trascendente del año, al fin la re re eleccion está encaminada; solo falta que chanten la firma, pero es un hecho consumado el titán del armado político televisivo se suma a las filas del oficialismo. Bienvenido Marcelo Tinelli a TeLeFe... ¿satisfechos?. Lo increible es que haya personas que todavía crean que la exposición mediática garantice una banca, donde esta aquella sociedad critica, analítica, argumentativa u opositora (?). En el 2009 cuando Néstor Kichner perdía frente a la versatilidad de una candidatura defendida de manera formidable por Roberto Peña; lo churo es que Roberto a pesar de haber sido el creador del "Alica, Alicate" no pudo disfrutar del confort del sillón legislativo, lugar que tampoco supo ocupar Francisco De Narvaez pero mes a mes fue a cobrar su beca. Con aquella elección marcada (?) por el "Gran Cuñado", tomaba nuevo impulso aquel mito del peso político del programa del empresario televisivo. El rumor nacía allá por el 2001 cuando se acusaba rumorosamente a Tinelli de pegarle un empujoncito al desequilibrado presidente De La Rua.
Hoy la situación parece retomarse y quien fuese acusado de productor de programas cosificadores, prostibularios, exagerados, sensibleros, lacrimógenos, manipuladores pero por sobre todo de altísimo rating, vuelve a tener sobre si, la lupa de la conspiración política. Sucede que tantos años en canal 13, del Grupo Clarín, hizo creer a los señores del grupo A que tendrían el programa más exitoso de la TV Argentina, de los últimos años, como herramienta proselitista. Por supuesto que la posibilidad de que Ideas del Sur mude sus productos a la pantalla de TeLeFe generó algo más que molestias. Cómo saldrán a paliar el hueco que dejara Tinelli es una incógnita. También lo es, qué inventara Marcelo para introducirse en la grilla de un canal que tiene un perfil más familiero. Lo concreto es que una lectura demasiado intrincada también sería caer en un error sin embargo el juego de la visión binaria nos privaría de percibir matices de esta escena que solo dará ganador al pibe de Bolivar.