El sionismo y el golpe blando

Argentina es uno de los países con mayor cantidad de ciudadanos de origen y/o profesión de fe judaica; algunos de ellos con pasaporte israelí y otros que forman parte del colectivo que algunos llamaron gauchos judíos.

El sionismo como movimiento; más allá que precede a la confección de Israel; tiene como uno de sus logros destacados el reconocimiento de ese estado; pero ¿era ese su único objetivo?.

En Wikipedia - si no están de acuerdo con la definición tiene la posibilidad de "corregirla" - se habla del sionismo como un "movimiento político laico" y agrega "constituye una rama del fenómeno más amplio del nacionalismo moderno. Descrito como un "nacionalismo en la diáspora", el sionismo se autodefine como un movimiento de liberación nacional, cuyo objetivo es la libre autodeterminación del pueblo judío."

Liberación nacional puede haber significado en diferentes épocas y regiones del mundo, ver nativos u originarios trabajando - o luchando - por defender su auto determinación. Caería de maduro pensar que los habitantes de un lugar tienen derecho a hacer imperar un sistema de libertad que los contenga e identifique y establezcan sus mecanismos para el desarrollo soberano de su patria; pero del mundo del que venimos donde imperaron los caprichos de príncipes de una sinarquía que ejerció opresión, sobre los diferentes pueblos patriotas del mundo, a punta de armas nucleares; la lógica y el respeto a los seres humanos termina condenada como más petulante afrenta contra esos poderes despóticos.

Retomemos la definición que nos ofrece la red. Otra característica que define la wiki, es la libre autodeterminación del pueblo… judío. Para mi infortunio no soy profesante de esa fe y por consiguiente me arriesgo a ser tildado de “tal por cual”; pero para los que me lean libres de apasionamiento y prejuicios continúo. En el caso de los hijos de cristianos, musulmanes, budistas, new age, etc. su definición y pertenencia poblacional es argentino, ¿sucede los mismo con las profesantes del judaísmo?. En algunos casi sí; pero que hay de aquellos que se sienten parte de un pueblo que lucho, resistió y consiguió el establecimiento de su estado; ¿que los mantiene atados a este exilio en el culo del mundo?; ¿se sumaron, aceptaron el sistema de libertad proclamado, procesado y sometido a modificaciones mediante los mecanismo establecidos en esta patria?.

Conozco judíos que no dudan de su pertenencia a esta nación; sigo destacando entre mis admiraciones la dignísima y abnegada labor diplomática llevada adelante por el Canciller Timerman en defensa de los intereses del país; a modo de uno de los muchos ejemplos existentes.

En un dilema complejo se encuentran nuestros compatriotas que ven, aunque sea de refilón, a quienes les han cooptado su identidad religiosa para atacar al país.

Es probable que de apellidarse Condorí los hubiesen visto a los pueblos originarios en algunas señales de TV, algunos, no pudiendo discernir si veían un canal de noticias o de documentales; pero el hecho del que hacen leña tiene a un protagonista con características más mediatizables, lo colocaron AM-PM en casi todos los canales de la TV porteña, que gracias a los monopolios aún vigentes, se los puede considerar medios nacionales y así catalogar de “la muerte que conmocionó al país”.

No me extenderé más explicando el rol que desarrollan estos medios porteños que se mancomunan con esa elite en el constante plan de desestabilización que llevan adelante.

Asistiremos en breve a una nueva manifestación de golpismo y tendremos que ser pacientes con aquellas pobres personas que miden su mundo en pulgadas; estemos atentos para defender nuestra casa, nuestro barrio, nuestra provincia y nuestra patria utilizando las vías de la Ley.

Por nuestro sistema de libertades (derechos y obligaciones) que llamamos Democracia, han pagado nuestros héroes, nuestros abuelos, padres, hermanos y nosotros mismos todos los días, no uno publicitado, trabajando; respetando y haciéndonos respetar esta herencia que llamamos Argentina.

Una nota interesante de BWN Argentina